no escucho y sigo, porque mucho de lo que está prohibido me hace vivir


11 ago 2013

Mi sueño es la fina mezcla entre
la risa y el llanto,
donde mantener la calma
para gritar cada tanto.
Aunque a veces no lo logre,
voy a seguir intentando
encontrar el equilibrio,
 o por lo menos no voy a dejar de buscar.
Rompiéndome el alma por situaciones
que yo misma elijo sentir,
el hielo de la muerte,
y el calor del pleno invierno.
Perdí el miedo a la distancia,
de lo malo y de lo bueno.
Hay que saber aceptar
que existen los días magros,
porque son el contrapeso de
los que traen milagros.
Ahora yo disfruto de verme parada,
es solo porque supe soportar

estar arrodillada.